A 400 km del Obelisco, Mar Chiquita se destaca por su hospitalidad y buena gastronomía.
En la tranquilidad de la Costa Atlántica hay un paraje tranquilo que se destaca por su belleza natural y por tener una laguna única en el mundo. Se trata de la “ciudad del pejerrey”, un destino que enamora con sus sabores y es considerado uno de los mejores pesqueros de Argentina.
La ciudad del pejerrey es Mar Chiquita, ubicada a 403 kilómetros de CABA. Se trata de un paraíso natural que esconde un secreto: alberga la única albufera de Argentina.
Esta laguna se conecta con el mar a través de una bocana, lo que genera un ecosistema único donde se puede encontrar al pejerrey, una de las especies más buscadas por los pescadores argentinos y a la que también se la conoce como “flecha de plata”, por su forma estilizada y agilidad con loa que se mueve en el agua.
En la laguna de Mar Chiquita se puede pescar todo tipo de especies de mar y fundamentalmente pejerrey, un pez plateado, mediano, de cuerpo alargado y muy sabroso.
El hecho de que Mar Chiquita sea una laguna albufera le otorga características especiales como aguas saladas, buena oxigenación y una buena disponibilidad de alimento, lo que hace que allí los pejerreyes tengan un tamaño importante y un sabor muy rico.
La cocina de Mar Chiquita gira en torno al pejerrey, que se sirve de muchas maneras: frito a la sartén con papas fritas, a la parrilla, con limón y hierbas, rebozado con salsa tártara, en empanadas o escabeches caseros, en pastas rellenas con pescado fresco.